Es curioso, o etimológico, que viene a ser lo mismo, cómo la palabra historia, tan ufana en el novecientos, tan autojustificativa, ha venido a formar parte de la frase no me cuentes historias.
Pronto o ya, no me cuentes autobiografías.
domingo, 30 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario